Sí, lo que ves en la imagen que ilustra el post es una gasolinera. Bueno… no es exactamente el concepto de gasolinera al que estamos acostumbrados, con servicios, lavadero, autoservicio,… Pero es que este surtidor es, ni más ni menos, que la “gasolinera” más cercana al Polo Norte geográfico.
Se encuentra en Longyearbyen, en la isla de Spitzbergen, a mitad de camino entre Cabo Norte, la zona más septentrional de Europa occidental y el propio Polo, a unos 1.300 km en línea recta de éste.
La empresa encargada de su explotación es StatoilHydro, la compañía petrolera estatal noruega, y lo único que tiene es una farola, imprescindible para repostar durante los cinco meses que dura la noche ártica cada año.
De todas formas, si por alguna casualidad vas a ir por la zona dentro de poco y planeas visitarla, te recomiendo que vayas acompañado, ya que la característica más reseñable de la zona, es que, matemáticamente, tienes las mismas posibilidades de encontrarte con un ser humano que con un oso polar. Así que será cuestión de hacerle caso a la señal de la imagen superior.
Vía: autobild
Fotos: autobild // travel.webshots.com
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